sábado, 27 de diciembre de 2008

Nada...

Me gustaría aprender a entender acciones sin explicación que se dan en la vida cada día, me gustaría comprender las situaciones que no entiendo quizá por inmadurez o simplemente porque son distintas. Suceden en la vida tantas historias que no son queridas ni esperadas, simplemente vienen sin ningún sentido, de forma ilógica llegan a ti sin pensar…
Hay tantas preguntas que hacer sin encontrar respuesta, porque la vida es una telaraña donde poco a poco quedas atrapado en un mar de ignorancia, planteándote mil dudas, y sin nadie capaz de resolvértelas. Todo aquel que lo intenta no es más que un ignorante más intentando convencerse de sus propios errores.
¿Es la vida quizá un trámite más para alcanzar la felicidad? ¿Es está una mera quimera? ¿Son los sueños sencillas utopías inalcanzables? ¿Es la realidad un espejo de un mundo ya realizado? ¿Quizá el destino está ya escrito para cada uno de nosotros? ¿O es el sufrimiento un ser más que lleva nuestras vidas a la desilusión, la agonía o la muerte? ¿Existe un ser supremo que controla el mundo y que lleva a la vida por un buen camino? ¿Es quizá la existencia del hombre fuente del azar, y que la vida no es más que lo que dura tu cuerpo? ¿Hay que disfrutar ahora porque después no habrá nada?...
Odio vivir en un mundo sin explicación y cada lágrima de dolor que llega a mi alma es una espina más clavada en mi corazón. Odio no entender porqué el mundo es cruel, ¿cuál es el propósito de tanto miedo? , ¿Quién es el culpable de esto? ¿Quién gana existiendo el sufrimiento?
Es la muerte quizá la única respuesta sabia al sinsentido, y ahora entiendo a aquellos que no teniendo nada, ni a nadie a quien amar, la vida les parezca absurda y un camino lleno de amargura y destinado a la nada.
Es tan triste pensar que después de tanto sufrimiento ocasionado por palabras, tantos años aguantando el soplar de ráfagas de rabia, al final quedemos siendo nada, y nadie nos recuerde, y nuestra vida con el tiempo termine siendo nada…nada…
No se puede dejar de lado el sufrimiento, es un compañero más de vida, que va haciendo que poco a poco la muerte vaya teniendo sentido, es aquel que te enseña a no tenerle miedo, a ver que quizá la nada sea mejor que esto…
Y es el dolor el culpable de mis palabras, de que mi corazón sangre y nadie pueda hacer nada. Es la realidad la que me invita a reflexionar, y es que de nada sirve pensarlo demasiado porque nada vas a arreglar, únicamente acabarás pensando, que a la nada vas a llegar…

miércoles, 24 de diciembre de 2008

La Magia de la Navidad...

Año tras año vuelve con nosotros la Navidad, unos días mágicos de felicidad, de luces, de fiesta, de familia, de amigos, de alegría, de sonrisas, de turrón, de mazapán, de belenes, de árboles y de ángeles que bajan a la tierra para ser vistos.
Estas fechas pueden ser las mejores o las peores de la vida de cualquier humano, porque en estas fechas además de todos los sentimientos y sensaciones escritos anteriormente, nace la nostalgia, el recuerdo, y las imágenes de otros años de personas y seres queridos que ya no están.
Y es hoy día importante para recordar, pero no con la tristeza de los ojos que aún lloran cuando el recuerdo vuelve a ellos, sino del alma que se siente protegida por aquella que hoy está en el cielo. Y allí está mi abuelo.
Aunque ya pasaron dos años desde aquel día 17 de Diciembre, aún hoy el recuerdo está tan vivo de sus ojos, su sonrisa, su valentía y su alegría que ni el tiempo, ni los problemas ni nuevas sensaciones han sido capaces de acabar o de hacer olvidar la pena tan grande que todos tenemos al recordar.
Por estos días, hace unos cuantos años, yo crecía lleno de ilusión, ahogado de regalos, en una familia normal, en una vida normal que cualquier niño hubiera deseado. Y yo pensaba y sigo pensando, en los pobres niños que no pueden disfrutar de estos días, porque la crueldad del sufrimiento se ha cebado con ellos. También pensaba en sus madres, en los enfermos, en los sin techo, y en tantas personas que no son envueltas con la magia de la navidad.
Y pensaba también, que no está en tener o en poseer grandes cosas, la magia está en las personas que a tu alrededor te quieren, te adoran, te protegen y te llevan por el camino de la felicidad.
Por ello, la navidad no es recibir, sino dar, dar a los demás aquello que tanto te gustaría que te dieran a ti. Intentar hacer del mundo un lugar mejor donde vivir, porque es nuestro corazón la mejor arma para hacer cambiar a aquellas mentes arrogantes, engreídas y superficiales que juegan a ser amos del mundo. Hagámosles cambiar, que la felicidad, la tolerancia, la igualdad sean propósitos que cumplir en esta Navidad.
Aquel ángel que hoy recuerdo me hizo ver que la felicidad está en el corazón de los demás y que sólo la encontrarás haciendo feliz a aquel con quién estás, aquel ángel lo consiguió. Nosotros, también podemos conseguirlo…

¡Feliz Navidad!

viernes, 19 de diciembre de 2008

Asustado...

Rodeado de Fantasmas que solo intentan engañarme entre sedientas polvaredas de amargura. Donde cada cuál elige y es dueño de sus acciones tan solo en el intervalo propuesto por un mundo, mundo con el cuál discrepo y que nos llevará a la nada.
Tan solo soy un niño, encerrado entre rejas de una jaula, la jaula de la libertad engañosa que nos quieren hacer creer que poseemos, cuando ni siquiera podemos ser como quisiésemos.
Somos títeres de una función que nos ha tocado representar, donde el guión ya está escrito y nada podemos hacer por cambiar, tan solo resignarnos y continuar, porque así es la vida del esclavo, el esclavo de la desigualdad. La desigualdad del dinero, del poder, de la ignorancia, del sexo, de la vida, todo ello nos induce a ser como ratas rastreras y egoístas que solo piensan en su supervivencia. Y es así, no hay nada más que pensar, oprimen nuestras mentes con el único propósito de hacernos animales, animales sin evolucionar.
Es injusta la existencia del hombre, y más aún cuando las desigualdades que comentábamos no juegan a su favor si no en su contra. Nadie se pone a pensar en lo que sus acciones puedan acarrear al resto de individuos de una misma comunidad, por ello la existencia del hombre se hace aún mas dura cuando dichas acciones le perjudican. No podemos hacer nada para cambiar la avaricia y el desinterés de muchas personas por un individuo más entre tantos. La solidaridad no es la virtud más extendida del alma humana y cuesta reprimir esa mirada interior egoísta que debemos cambiar.
Y no importa lo que diga, porque tan solo soy un niño, un niño asustado por un mundo que va hacia su propia destrucción. Solo sé que una caricia, mirada o sonrisa, puede alegrar el alma de cualquier vida.

sábado, 13 de diciembre de 2008

Cosas De Ángeles...

-Vivimos en un pueblo, encerrados en un nido de ignorancia, de pensamientos y sentimientos retrógrados que juegan poco a poco en contra nuestra. Y no podemos hacer nada porque cambiar el mundo es imposible, y el mundo nunca evolucionará por si solo, a no ser que vivan la misma experiencia que vivimos nosotros, algo irreal, imaginario, fantástico y especial.
-Es verdad que vivimos en una cárcel de crueldad, pero así es el mundo todo él. Vayas a donde vayas vas a encontrar a los de siempre, gente sin vida cuya afición no es otra que joderle la vida a los demás. Hay que aguantarse, la vida es dificultad y sufrimiento.
-No tiene porque ser todo igual, quiero irme a una ciudad sin dueño, donde nadie te conozca y nadie piense nada de ti, donde cada vida sea independiente y donde puedas ser feliz hagas lo que hagas.
-Esto también tiene cosas buenas, la gente que te conoce nunca se pondrá en contra de ti, y siempre que necesites ayuda siempre habrá alguien que te la proporcione. En otro lugar, si nadie te conoce, nadie te auxiliará, la gente es egoísta, fría, insípida…
-Prefiero eso ha esta madriguera de mediocridad, donde a cada paso alguien te vigila para luego hablar mal de ti, son víboras, cada cual peor, el caso es que estoy harto de fingir ser tan mediocres como ellos son.
-Aún no puedes hacer nada, aún no abriste las alas y no podrás así volar. Cuando ello suceda, nos iremos, aunque todavía quedan años que aguantar, a pesar de todo, yo soy feliz.
-Podíamos estar peor, como nuestros antepasados lo estuvieron, solo espero que a los que vienen detrás les dejemos un mañana más cálido que el de hoy, y que no retrocedamos en pasos que se dieron bien aunque a destiempo.
-Esperemos también, que sus mentes no estén paralizadas, que no hagan caso a todo lo que les impongan y que sepan luchar por lo que quieren, porque solo aquellos que luchan son los que ganan. Los que se conforman con lo que les dan, tan solo son burdas marionetas de un estado que solo saca beneficios de las personas que dejan su vida y sus fuerzas trabajando, porque lo que los jefes quieren, es convertirlos en seres sin pensamiento, así estamos, renegados, por que muchos han recibido una educación basada en la intolerancia, la desigualdad, la idiotez…
-Y otros tenemos que pagar las consecuencias de un pasado, no nos dejan ser, tan solo jodernos y conformarnos con lo que nos ha tocado y pensar que todo puede ser aún peor… Es la razón de la conformidad más absurda del hombre, menos mal que nacimos ángeles…

-Sí, aunque no nos dejen serlo…

viernes, 12 de diciembre de 2008

Al Salir El Sol...

Descubrí nada más nacer, que la felicidad es un plato servido poco a poco, que cuando esperas encontrarla acabas renegado a la soledad del alma, y cuando simplemente vives para escribir con sudores una vida más, consigues pequeños momentos de felicidad.
Es interesante mostrar lo que sientes y que otros puedan entenderte, lo es aún más cuando no eres más que un individuo como cualquier otro intentando luchar por labrarse un destino. Es dificil comprender las situaciones ajenas si no has sufrido algo parecido, pero hay está el camino, el camino que nos toca vivir a cada uno por separado.

Soy el niño vaho, vivo en una burbuja oxidada mirando a los ángeles y viendo que ellos sí que se lo pasan bien. Mientras tanto, aquí dejo una huella más en mi camino...paso a paso... voy perdiendo el equilibrio...


Dedicada al dolor

Amargura servida en pequeños platos,
Es la ración que tiene la vida para darnos,
Es en sí un hecho irrelevante,
Que a todos nosotros se nos presenta delante.

Y no hay quién capaz de hacerle frente,
Porque el odio es más hábil que cualquiera con suerte,
No es si no una manera de odiarlo,
El que alimenta sus ganas de hacerte daño.

Y es que su naturaleza viva es evidente,
Está en cada una de nuestras mentes,
Incapaces de resistir su victoria,
Nos hará sufrir hasta acabar con nuestra memoria.

Y es en el día en que nosotros dejemos de existir,
Cuando seremos capaces de derrotar al sufrir,
Ambos dos terminaríamos siendo nada,
Mientras tanto solo hay que esperar su nueva jugada.









...Y quiero encontrar las Alas que me hagan Volar...